NED #16. Reflexiones tras 100 episodios

¡Muy buenos días! Las semanas pasan volando y ya estamos otra vez en viernes, el día reflexivo de Desarrollo de negocios titulado “Negocios en directo”, espacio donde hablo sobre mis proyectos en tiempo real y reflexiones varias. Aquí te dejo, como siempre, la escaleta del programa.

¡100 programas! ¡Ay que ver cómo pasa el tiempo! Un 8 de Octubre de 2018 comenzaba este podcast y ya vamos por el programa 100.

Hoy vamos a reflexionar sobre algunas cuestiones de este programa y ver todo lo que ha dado de sí realizarlo en 100 ocasiones.

¿Por qué comencé un podcast?

Antes de siquiera en pensar hacer un podcast, yo era oyente de programas en este tipo desde hacía ya bastante tiempo y es un formato que me encantaba. Te lo puedes llevar a cualquier parte y sirve para aprender o disfrutar mientras haces otras tareas más pesadas, cómo limpiar o cocinar.

En mi web tenía varios artículos escritos, aunque cada vez escribía con menor frecuencia. Creo que empecé escribiendo un artículo cada 3 días, luego pasé a hacerlo semanalmente… y nada, los tiempos se espaciaban y cada vez tenía menos ganas de retomar el hábito de escribir con cierta frecuencia.

En parte lo que ocurría era que cuando escribía algo, nunca terminaba de estar contento. Siempre veía muchos fallos y cosas a mejorar, y claro, cuando te obsesionas con hacerlo perfecto… acabas por no hacer nada.

La idea de crear un podcast siempre estuvo en mi mente, pero nunca lo acababa de ver claro. Para empezar, creo que soy bastante malo hablando. Me expreso mucho mejor escribiendo y me siento más cómodo con la hoja de Google Docs que delante de un micrófono.

Y creo que la opción de salir a probarme a mí mismo en un medio en el que no me sentía nada cómodo ni era bueno fue lo que me impulsó. Total, no tenía nada que perder. En el peor escenario posible simplemente habría hecho una serie de programas que nadie escucharía y nada más, ahí quedaría el intento.

También, el hecho de comprometerme ante mi grupo de mastermind, supuso que no hubiera vuelta atrás en el lanzamiento, y es algo que te recomiendo. Si quieres hacer algo pero no te acabas de decidir a dar el paso, comprométete ante alguien que te “meta caña” si no cumples, verás como al menos lo intentas. Y es que se trata de eso, de al menos intentar las cosas. Hay que hacer cosas para que ocurran cosas, no puedes permanecer a la espera de que llegue alguien a hacerlo por ti.

Tras 100 programas creo que soy un poquito menos malo delante del micrófono y ya no me impone como al principio. Ahora grabo a gusto, por así decirlo.

¿Es buena idea hacer un podcast diario?

Hacer un podcast diario es tan buena idea como mala. El tiempo que te va a consumir y el compromiso que adquieres es enorme, pero los aprendizajes lo son más. El hábito que he adquirido de escribir cada día un artículo y luego grabar un podcast ya ha hecho que merezca la pena seguir con ello, aunque no me escuchase nadie.

Si estás pensando en grabar un podcast diario o escribir un artículo cada día debes pensartelo dos veces. Si estás dispuesto a asumir ese compromiso debes saber que lleva horas de trabajo que tendrás que restar de tu tiempo de ocio, descanso o de donde sea.

En mi caso estoy encantado, ya que me supone un reto diario, además de darme energía para hacer otras tareas, me explico. ¿No os pasa a veces que cuantas más cosas tenéis que hacer más motivados estáis y más productivos sois? Y al contrario, ¿tenéis épocas de poca actividad y esos pocos compromisos a los que debéis hacer frente os “cuesta la vida” cumplirlos? A mi esto me ocurre tal como lo cuento, así que el tener que hacer este programa a diario digamos que me recarga las pilas para poder hacer otras cosas.

¿Qué he aprendido en 100 programas?

Creo que lo más importante que he aprendido es que la constancia es complicada, pero hay que seguir trabajando en ella para ganarte su confianza. El pico y pala es un trabajo duro, del día a día, y de cavar y cavar sin saber cuando y donde vas a llegar.

He observado que hay muchos blogs y podcast que comienzan con ganas y con el paso del tiempo van perdiendo fuelle hasta abandonarlo. En ocasiones creo que incluso es porque realmente no les gusta lo que hacen, ya que tienen cifras importantes de escuchas y seguidores, pero ni aún así siguen adelante.

Ese es otro punto clave para mi y uno de mis aprendizajes. Tienes que hacer algo que te guste (en términos generales de la vida), pero aplicándolo al mundo de los podcast, blogs y similares, si solo estás en búsqueda de la recompensa, no durarás mucho.

Yo soy consciente de que mi podcast lo escucháis muy poca gente, pero me gusta hacerlo, aprendo mucho escribiendo y realmente me motiva. Sin este factor ni en sueños hubiera podido llegar a cumplir 100 episodios.

¿Qué es lo más difícil de hacer un podcast diario?

Una de las cosas que más me cuesta es la organización. Cuando hablamos de escribir un artículo para luego grabar un episodio del podcast, no es algo que se pueda cuantificar en tiempo.

Puedes agendar x horas para dedicar a la escritura, pero los avances en cada caso son totalmente diferentes.

La inspiración viene cuando quiere, y hay días en los que escribir se convierte en una tortura. Recomiendo que si quieres ponerte una rutina de escritura, seas bastante estricto y trates de dedicarle un tiempo fijado en una franja concreta que sea siempre la misma. Habrá días que avanzarás más, otros que no saldrá una sola palabra de tu teclado, pero el hecho de convertirlo en un hábito te servirá para ganar esa fortaleza mental tan necesaria si quieres ser constante.

Otro de los puntos críticos de hacer un episodio diario es el hecho de tener la sensación de no parar nunca. Acabas el episodio de hoy y ya estás pensando en el de mañana, sin poder saborear casi lo que acabas de hacer. Afortunadamente están los fines de semana que sirven para recargar pilas y desconectar, algo absolutamente necesario para no acabar quemado, aunque te guste mucho lo que hagas.

¿Cuales son los planes de futuro para el podcast?

Cómo te he comentado en respuestas anteriores, el podcast me está dando mucho, sobre todo buenos hábitos, por lo que mi intención es seguir con él. Por supuesto iré haciendo cambios con el tiempo según lo que me vaya apeteciendo y el feedback que me vayáis dando, pero vamos, tengo clarísimo que voy a seguir con él, simplemente me encanta hacerlo.

De hecho, se vienen retos interesantes a la vuelta de la esquina. En breve me voy a Camboya, y va a ser toda una aventura. No tengo ni idea de como me lo voy a montar para grabar desde allí, ya que además, iré bastante justo de tiempo, pero seguro que algo invento.

¿Algo que comentar a mayores?

Un par de cositas que no podía dejar en el tintero.

Primero, comentar que lo que más echo en falta en el podcast es poder escuchar a la comunidad que está detrás. Quizá sea porque el formato podcast no induce a esa comunicación, pero me gustaría crear una comunidad con la que poder comunicarme de una forma más directa y, quién sabe, quizá surja algún proyecto interesante.

También me gustaría romper la frontera del podcast y extender estos programas a YouTube, quizá con un formato diferente, o solo para ciertos contenidos, pero en cualquier caso para dar este paso aún faltan meses, ya que mi situación actual es bastante movidita por todo lo que llega ahora.

Y sin más, acabo el episodio de hoy agradeciéndote a ti, que estás al otro lado del auricular, simplemente el hecho de acompañarte durante estos 10 minutos al día que te robo. Espero que estés disfrutando y aprendiendo con este podcast y espero que sigas acompañándome otros 100, 1000 o quién sabe cuantos episodios 🙂

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *